El Parlamento Europeo ha aprobado una Resolución en la que se dictamina que “la eutanasia, en el sentido de la muerte intencional, por acción u omisión, de un ser humano en función de su presunto beneficio, debe ser prohibida siempre”.
De esta manera, la decisión del Consejo de Europa sienta un importante precedente en favor de la vida, ya que es la primera vez que una institución política europea se manifiesta de forma tan clara y rotunda contra la eutanasia. De hecho, en la misma resolución de la Asamblea Parlamentaria se especifica que, “en caso de duda, la decisión siempre debe ser pro-vida y a favor de la prolongación de la vida”.
“Alemania facilitó el atajo a la ley que aprobaba la eutanasia en la década de los años veinte. Se ejecutaban muchos enfermos terminales en los sanatorios públicos germanos; se invocaban motivos de conmiseración, calidad de vida y la detención del gasto público. Los partidarios de la eutanasia asientan sus teorías en aspectos utilitaristas.
Ordenar la práctica de cortar el hilo de la vida, es matar clandestinamente a un ser humano, es un asesinato. Por otra parte, sacrificar a un recién germinado con malformaciones, se califica como infanticidio.
Estas maniobras están enfrentadas a todos los códigos éticos, médicos y legales y van en contra de la Declaración de los Derechos Humanos, internacionalmente admitidos.