Según el autor de bestsellers norteamericano John Eldredge, la “parte más sensible” de una mujer es su belleza. Quizá en ningún otro punto de su ser sea una mujer tan vulnerable como cuando se plantea la cuestión de su propia belleza. Tal vez, sin embargo, no haya ningún otro punto en su ser que tenga tanta fuerza. Pero ¿qué hace hermosa a una mujer, a una persona?
“Para mí, la belleza es exclusivamente carácter y personalidad; todo lo demás es mera estética”, dice Leonie Charlotte von Hase. El 15 de febrero, esta mujer de 35 años fue elegida oficialmente como la mujer más hermosa de Alemania. De sonrisa radiante, es la ganadora de mayor edad en la historia de los concursos de Miss Alemania… y la primera mujer que consigue este título siendo madre.
Su elección como Miss Alemania 2020 no solo fue merecida, sino que también muestra la reorientación consciente que ha experimentado el concurso nacional de belleza. Desde 2019, el concurso desea presentarse “más abierto, interactivo y multimedia que nunca”. Quién sea coronada como la ganadora lo decidirá no tanto una “belleza superficial”, sino la autenticidad y el carácter.
Leonie von Hase es, efectivamente, una mujer con perfil propio. Nació en Namibia de padres germano-africanos y creció con tres hermanas mayores en una granja. “Mi infancia fue purista; no está marcada por la influencia de los medios”, recuerda. “No tenía ningún ideal de belleza, excepto mi madre”. El amor de Von Hase por la naturaleza se ha mantenido también en la gran ciudad. En Ciudad del Cabo estudió Artes Dramáticas, Filología Inglesa y Ciencias de la Comunicación; más tarde vivió en Londres, Stuttgart, Berlín, Atenas, Milán y otras ciudades. “Una vida en estrecho contacto con la naturaleza forma parte de mi armonía personal”, explica. “Y por eso afirmo que cualquier persona que pasa tiempo en la naturaleza irradia más equilibrio”.
Algo más que medidas ideales
Para Von Hase, lo decisivo es la autenticidad, no la adaptación a las ideas difundidas por los medios. “En general, me parece difícil orientarse por los ideales sociales de belleza”. Los medios de comunicación y la industria cosmética transmiten constantemente a las mujeres, ya sea subliminal o abiertamente, que están en el “abismo de su belleza” y que tienen que hacer esto o aquello para mejorar su apariencia. ¿Pero no es esta una idea que también impulsan los concursos de belleza? “Pienso que cada mujer puede y debe decidir por sí misma si puede encontrar un beneficio al participar en un concurso de belleza”, dice Von Hase. Especialmente en los países del Tercer Mundo, una victoria podría ser un trampolín para las jóvenes y sus familias. “Sin embargo, no me presenté a Miss Alemania porque quisiera ganar un concurso de belleza, sino porque el concurso ya no solo trata de belleza, sino de mucho más”.
Tal vez este “mucho más” ha acercado el concurso de Miss Alemania a la esencia misma de la belleza. Después de todo, la belleza es “mucho más” o quizás algo completamente distinto a las medidas ideales del cuerpo y los buenos cosméticos. “Una persona puede tener un rostro maravillosamente simétrico, pero si no irradia simpatía, no es bello”, afirma Von Hase. Es decir, que el núcleo de la belleza de una persona se encuentra por debajo de la superficie de sus rasgos faciales. La belleza parece ser sobre todo un asunto del corazón. “La verdadera belleza de una mujer se refleja en su alma”, escribe Audrey Hepburn. “Es el cuidado que da con amor, la pasión que muestra”.
La belleza es menos una cuestión de apariencia que una expresión de toda la persona
¿Es la belleza el resultado del amor de una persona? Eldredge también ve la cuestión de la propia belleza estrechamente ligada al amor. “¿Soy adorable?” es la “pregunta del corazón” que se hace una muchacha. Tal vez una mujer solo pueda irradiar la verdadera belleza si ha encontrado una respuesta a esta pregunta en la conciencia segura de ser amada y en la transmisión de este amor. Dice Hepburn: “La belleza de una mujer debe verse desde sus ojos, porque es la puerta de su corazón, el lugar donde reside el amor”.
“El estilo siempre es único”
También Leonie von Hase presta atención a los ojos cuando se encuentra con una persona… y después a los zapatos. En su plataforma online The Leonie Store ofrece ropa y productos vintage. Von Hase ve la ropa sobre todo como “expresión creativa”. “No me interesa seguir las tendencias de la moda o los ideales de belleza predeterminados”, dice. “Eso es exactamente lo que me gusta tanto del vintage. Todo es único; el estilo siempre es único”. Las mujeres alemanas podrían ser un poco más audaces, piensa, y asumir más “riesgos estilísticos”. “A cambio, tienen un muy buen gusto por la apariencia clásica y elegante”.
Sin embargo, no está segura de que la belleza sea básicamente un tema típico de las mujeres como, por ejemplo, subraya Eldredge. “Creo que las mujeres se han visto reducidas a ese tema durante demasiado tiempo”. No obstante, von Hase considera que “el sentido de la belleza y la estética” es una “cualidad femenina”, ya sea “por prestar atención a un hermoso ramo de flores o al diseño de la propia casa”. En su opinión, convertirse en madre es también formativo para la percepción del propio entorno: Von Hase tiene un hijo pequeño. “Con la experiencia de ser madre me he vuelto muy sensible y me siento rápidamente tocada por la belleza de la naturaleza, por los momentos conmovedores con mi hijo, pero también por cuestiones sociales que influirán en el futuro de mi hijo”.
Como el concurso de Miss Alemania de este año deja particularmente claro, la belleza es menos una cuestión de apariencia que una expresión de toda la persona. La belleza vive de la historia, de las experiencias, de la actitud de una persona, viene del corazón. Quizá precisamente por esto sea tan decisiva la autenticidad que Von Hase deseaba en su declaración sobre el concurso de Miss Alemania.