Las personas que padecen o pudieran padecer cáncer de mama tienen una buena noticia en estos días: un fármaco inhibidor de los estrógenos puede hacer innecesaria la quimioterapia, que además de muy molesta, en muchos casos no logra detener el avance de la enfermedad.
Según un estudio elaborado por el Vanderbilt University Medical Center y citado por el New York Times, un test genético de la paciente puede bastar para saber si puede saltarse la quimio y únicamente hacer frente al tumor con un medicamento –el tamoxifen– que bloquearía la producción de las hormonas mencionadas.
Fuente: The Wall Street Journal; The New York Times
«Podemos evitar que miles y miles de mujeres reciban un tratamiento tóxico que en realidad no las beneficia. Esto es impresionante, y realmente cambia el patrón de los cuidados médicos”, afirma la Dra. Ingrid A. Mayer, coautora del estudio.
Según otra fuente, el test puede librar de la quimio a unas 60.000 estadounidenses cada año. Solo en 2018 verán la luz unos 260.000 nuevos casos de cáncer de mama en ese país. A nivel mundial, en 2012 hubo 1,7 millones de diagnósticos y medio millón de muertes.
Muy en línea con la estrategia de buscar alternativas a la quimioterapia ante esta variedad de cáncer, otra investigación, efectuada por un instituto de salud británico y a la que el Wall Street Journal dedicó un artículo, refiere que disminuir de un año a 6 meses el período de aplicación del medicamento Herceptin puede evitar a las pacientes el riesgo de que se les potencien enfermedades cardiovasculares, y ello sin que disminuya la efectividad del fármaco contra el tumor.
De igual modo, otro artículo del diario revela avances en el tratamiento del cáncer de pulmón, a partir de la inmunoterapia. Dos medicamentos de este corte, el Keytruda y el Tecentriq, administrados en cada caso junto con la quimio, ayudarían a prolongar la media de supervivencia a esa enfermedad, que mata anualmente a 1,6 millones de personas en todo el orbe.
No obstante, no toda innovación de inmunoterapia ha tenido resultados positivos. El Nimoluvab, un fármaco que se ha estado probando para combatir ocho tipos de cáncer, ha fallado contra un tipo específico de leucemia y el ensayo ha debido suspenderse luego de que tres pacientes vieran recrudecerse su enfermedad tras una sesión del tratamiento.
Según expertos citados por el NYT, todo indica que los inhibidores que debían activar a los glóbulos blancos –una parte del sistema inmunológico que ataca a los tumores–, en los pacientes con esa variante de leucemia, activaban además a las células tumorales.
Estos casos, afirma el diario, “son un sobrio recordatorio de que la inmunoterapia está aún en sus inicios, y de que puede desatar fuerzas poderosas que aún no comprendemos completamente”.