SEMANA SANTA 2010
Mira al cielo con gesto suplicante
completando la entrega de su vida,
que acabará en apenas un instante
tras dejar las Profecías cumplidas.
Luego vendrá la lanzada punzante
y la Iglesia mana de su herida.
Nada volverá a ser como antes
pues hasta la muerte queda vencida.
Al verte el alma se emociona y llora
su pecado, que a veces la domina
cayendo en tentación provocadora.
Cristo vivo, que tu misión culminas
con la palabra que al Padre implora
¡Obra feliz del escultor Marinas!.