Apenas se ha cometido
el pecado original,
Dios, con amor infinito,
al hombre sale a buscar;
así la Biblia lo cuenta
cuando al esconderse Adán,
que se oculta por vergüenza,
le dice Dios “¿Dónde estás?”.
Es éste solo el inicio
de una nueva realidad
que se repite por siglos
y siempre perdurará,
porque con cada individuo
que Dios decide crear,
le tratará como a un hijo
y le busca sin cesar.