El siglo XX dejó constancia de la barbarie de la que es capaz el ser humano. Uno de los mayores destrozos fue el bombardeo sistemático de Montecassino por las tropas aliadas…
CUNA DE LA CIVILIZACIÓN
Siglos de historia en silencio
aguardan que los visites:
deja el corazón abierto
y oye lo que te trasmiten;
aquí se encuentra la cuna
de la civilización,
de la cultura que aúna
de Europa cada nación.
Es lugar de vida pura,
de alabanza y oración,
vida penitente y dura
que te acerca más a Dios.
En un lugar destinado a la paz, las bombas dejaron todo destruido…pero el mal nunca tiene la última palabra y ahora la Abadía de Montecassino disfruta de nuevo de todo su esplendor.
BOMBAS SOBRE LA PAZ
Paz, paz, paz…
en un lugar de oración
solo se pudo escuchar
explosión tras explosión;
paz, paz, paz…
las bombas del cielo bajan
y rompen la soledad
del lugar donde rezaban;
paz, paz, paz…
el afán de destruir
hacía las piedras saltar
en un ataque sin fin;
paz, paz, paz…
ahora reina por doquier
porque nunca vence el mal
donde sobreabunda el bien
La Abadía de Montecassino es un foco espiritual importante, además de cuna de la civilización occidental y recuerdo de la barbarie de la 2ª Guerra Mundial.
LA RECONSTRUCCIÓN
Los cimientos, las raíces
de tus mejores valores,
hechos tristes y felices
de tantas generaciones.
Estos muros te transmiten
la vida que floreció
y que los libros no dicen,
pero está en el corazón.
Han sufrido los horrores
de terremotos y guerras,
los odios y los rencores
que destrozaron sus piedras.
Pero el amor es más fuerte
y siempre reconstruyó
lo que el mal matar no puede
en su afán de destrucción.