Aunque está muy extendida la idea del trabajo como castigo, si alguien se toma la molestia de echarle un vistazo a las primeras páginas de la Biblia, el Génesis, puede leer un relato de la mejor literatura universal y salir del error, al ver que Dios crea al hombre para que trabajara…Bueno, de ahí parte la idea central de este soneto, que espero os guste.
TRABAJO Y SANTIDAD
El mundo con sus cantos de sirena
de continuo te llama, te seduce
y te impide tener la vida plena
de quien todo quehacer a Dios conduce.
Cuando es toda tu vida de amor llena,
la paz y la armonía en ti produce;
no trabajes por miedo a la condena:
trabaja bien, que así es Dios quien se luce.
Es fuente del sustento que mereces;
si conviertes trabajo en oración,
con la ayuda de Dios, en gracia creces.
Trabajas ayudando a la creación,
colaboras con Dios y le obedeces,
recibiendo por Él su bendición.