Si, para la fidelidad,…eso que se prometen los novios al contraer matrimonio…
Pues de eso va este poema, cuyo título ya anuncia lo que va a venir a continuación: a ver si os gusta y quienes pronuncian en el día de su boda estas palabras, lo hacen con la esperanza y la intención de que se hagan realidad.
LO QUE DIOS HA UNIDO…
Los años han pasado,
viviendo día a día,
mientras desarrollamos
juntos la biografía,
de dos seres unidos
por unos ideales
y por haber compartido
los bienes y los males.
Mirando desde el otero
de los cincuenta,
tras el paso del tiempo
no se lamenta
emprender la aventura
de vivir juntos
y en el alma perdura
un afecto profundo,
que fue creciendo
por nuestra voluntad,
cuidando el sentimiento,
dándonos de verdad.
Cuando hay dificultades,
a veces te repito
que en esto lo que vale
es trabajo en equipo;
que para el bien y el mal
los dos ya somos uno
y hemos de navegar
llevando el mismo rumbo.
Viendo además los frutos
que nacen del amor,
bien parece lo justo
que demos gracias a Dios
por unos hijos nobles,
abiertos y entregados,
que con un sí responden
a quien les ha creado.
Aunque aún no sepamos
cual es el porvenir,
desde hoy aceptamos
lo que pueda seguir
en el guión del libro
de nuestra historia,
pues lo escribe Dios mismo
y termina en la Gloria.
Y cualquiera que sea
no es el punto final,
es Dios quien nos espera
para la Eternidad.
José García Velázquez.