Un chaval culpa a su hermano menor del desaguisado que acaba de causar. Otros copian del compañero antes de entrar en el cole, las tareas que no han hecho. El poco estudioso procura “copiar” en el examen para no dejarlo en blanco. La culpa de llegar tan tarde a casa la tuvo la pila del reloj que se gastó.
Achacamos a un fuerte dolor de cabeza nuestro comportamiento malhumorado. “Todos lo hacen”, es la razón esgrimida ante determinados comportamientos. Deben ser, éste y otros similares, los que hacen que, un día sí y el siguiente también, nos enteremos de comportamientos fáciles, de demasiadas personas, que escandalizan por los resultados. ¿Qué está ocurriendo?
Es suficiente con echar un vistazo alrededor para darse cuenta. Corren tiempos en los que, ronda a todos, – ya sea como particulares o como miembros de cualquier entidad -, y, de forma bien visible, la “tentación de lo fácil”.
El Diccionario de la RAE nos aclara cualquier duda al respecto. Acerca de “tentación” dice que es: la “instigación o estímulo que induce o persuade a una cosa mala”. Con respecto a “fácil”, dice que es “lo que se puede hacer sin gran esfuerzo”.
Ambas definiciones hablan de conseguir, lo que sea, sin trabajo y rechazando todo el esfuerzo posible, en el que entran todas las justificaciones injustificables y todas las consecuencias de la aceptación de la responsabilidad de los actos realizados.
También hablan de pereza, de egoísmo, de miedo al trabajo, de desinterés por los demás... cosas de las que ahora se habla poco y sí de las contrarias. Hablan de la tentación como una “instigación”, nunca de una justificación porque su aceptación no es obligatoria y, salvo casos bien concretos, siempre es personal y voluntaria.
En la actualidad, nos preocupamos de aspectos que nos parecen, – sin serlo -, imprescindibles en la formación completa de la persona. A cambio, estamos descuidando otros que sí lo son, como la voluntad.
La voluntad es una facultad tan importante, que su ausencia tiene mucho que ver con los comportamientos caprichosos y a veces un tanto cerriles de algunas personas.
Este somero vistazo, puede dar luz acerca de la actual facilidad para caer en la tentación de lo fácil. En pocas ocasiones como en la presente, se dio lo que ahora contemplamos: una abundancia colosal de tentaciones, frente a una severa escasez de valores.