La polémica nueva propuesta de ley sobre el Registro Civil es absurda e incoherente. Para las principales asociaciones de familia, detrás de esta modificación del modelo registral, se oculta la voluntad del Gobierno de destruir la imagen de familia.
Al menos así lo ve el Instituto de Política Familiar, destinado a la promoción y defensa de la familia ante la opinión pública y los poderes gubernamentales. «Este proyecto de ley es una medida absolutamente agresiva, encaminada a destruir el concepto de familia», dice Eduardo Hertfelder de Aldecoa, su presidente. «Pero no es el primer ataque, sino uno más de un cúmulo: como ya no llamar marido y mujer a los matrimonios sino «cónyuge A» y «cónyuge B», o como la ley de divorcio exprés», agrega Hertfelder.
Con esta iniciativa, que abandona la prevalencia del apellido paterno, el Gobierno comienza un «debate innecesario» que «no está en las demandas sociales urgentes». El proyecto de ley también cambia el tradicional libro de familia por un registro particular para cada vecino, vinculado a un código personal, con el que podrá acceder a la base electrónica en la que se registrarán todos los datos.
También, Hazte Oír, ha difundido un comunicado en el que califica la creación de un «código personal de ciudadanía» y la eliminación del concepto del Libro de Familia del Registro Civil como «un paso más para hacer desaparecer la familia de la ley». «Es el proyecto de reingeniería social que el Gobierno lleva aplicando desde hace seis años», dijo su presidente, Ignacio Arsuaga, que también afirmó de las fuerzas parlamentarias «que dicen proteger a la familia» a que presenten las enmiendas que eviten que se dé un nuevo paso hacia «la destrucción de la institución familiar natural». También anticipó que en breve presentará un libro en el que se desmenuza «el proyecto de imposición ideológica» del Gobierno. (Fuente: ABC)
“La sociedad no es sino el desarrollo de la familia; si el hombre sale corrompido de la familia, entrará corrompido en la sociedad”, afirmó Jean-Baptiste Henri Lacordair, político y orador francés.